para vivir y reinar plenamente en mí,
para realizar los designios de tu bondad
y consumar la obra de tu gracia.
Ven a mí para destruir todo lo que te disgusta
y para obrar todo lo que tú deseas.
Ven en la santidad de tu Espíritu
para unirme perfectamente a ti.
Ven en la pureza de tus caminos para cumplir en mí,
al precio que sea,
todos los designios de tu amor.
San Juan Eudes
(1601-1680)