Perdonar

En aquellos que nos hieren (o nos han herido) hay también bloqueos, llagas y enmarañados ovillos. Su falta de amor no ha sido necesariamente deliberada, quién sabe si no tienen detrás una historia más conmovedora que la nuestra. No se trata de eximir, sino de reconocer que en aquel que no me ha hecho justicia o no me ha devuelto la cordialidad que invertí en él, existe alguien puesto a prueba pro situaciones extremas. Y que la herida ahora abierta no estaba destinada a mí: era un magma de violencia a la deriva, listo para explotar.

El acto de perdonar es una declaración unilateral de esperanza. El perdón o es una cuerdo. Si espero que el que me ha oprimido venga a mi encuentro y me arranque la tristeza, puedo esperar sentado. El perdón es un gesto unilateral que enmudece la voz de la venganza y cree que detrás del que me ha herido hay un ser humano vulnerable, capaz de cambiar. Perdonar es creer en la posibilidad de transformación, empezando por la propia.



Autor: José TOLENTINO MENDONÇA

Título: Pequeña teología de la lentitud

Editorial: Fragmenta Editorial, Barcelona, 2017, (pp. 20-21)




Texto en formato pdf