en caricia, comprensión, buena noticia.
Cambia mis oídos llenos de ruidos y críticas,
en atención acogedora.
Cambia mis ojos curiosos,
en una mirada misericordiosa y contemplativa.
Cambia mis manos activistas
en otras que acompañen y construyan vidas.
Cambia mis pies veloces y estresados
en otros rápidos que busquen al hermano.
Cambia mi cabeza llena de agobios,
en otra sosegada y solidaria.
Cambia mi corazón distraído y frívolo,
en otro que busque, encuentre y disfrute.
Señor, envuélveme en tu amor, renuévame por dentro.