Oración al Dios único

Oh Dios, Tú eres nuestro Creador.
Tú eres bueno y tu misericordia no tiene límite.
A Ti la alabanza de todas las criaturas.

Oh Dios, Tú nos has dado a los hombres
la ley interior de la que debemos vivir.
Nuestra tarea es hacer tu voluntad.
Seguir tus caminos es conocer la paz del alma.

A Ti te ofrecemos nuestra obediencia.
Guíanos en todos nuestros caminos,
líbranos de las malas tendencias
que desvían nuestro corazón de Tu voluntad.
No permitas que, invocando Tu Nombre,
justifiquemos los desórdenes humanos.

Oh Dios, Tú eres el Único.
A Ti va nuestra adoración.
No permitas que nos alejemos de Ti.

Oh Dios, juez de todos los hombres, ayúdanos
a formar parte de tus elegidos en el último día.

Oh Dios, autor de la justicia y la paz,
concédenos la alegría verdadera, el amor auténtico
y una fraternidad duradera entre los pueblos.
Cólmanos de tus dones por siempre. Amén.


(Oración pronunciada por San Juan Pablo II durante su viaje a Marruecos, 
en Casablanca, el 15 de agosto de 1985, ante miles de musulmanes)