Tu belleza es inaccesible

Tu belleza es inaccesible,
tu esplendor no tiene igual,
tu gloria es incomparable.
¿Quién te ha visto o podría verte por completo, a Ti, Dios mío?
¿Qué ojo tendrá la fuerza de contemplar el Todo?
¿Quién podrá percibir al que está por encima del Todo
y comprender y contemplar al que mantiene unidos todos los seres,
que está fuera de ellos
y que, llenando el Todo y todo lo que contiene,
se encuentra siempre, de un modo inexplicable,
todo entero fuera del Todo?


(San Simeón el Nuevo Teólogo, +1022)