El corazón desquiciado

¿Quieres conocer al hombre que tiene el corazón desquiciado? 

Lo reconocerás por su mucho hablar, por la turbación de sus sentidos y por el hecho de que litiga por tener razón en cualquier cosa de la que se trate. 

Pero aquel que ha saboreado la verdad no litiga ni siquiera por la verdad. 

Aquel que se comporta de un modo celoso con los hombres a causa de la verdad, todavía no ha aprendido la verdad, tal como ella es.

Cuando de hecho aprende realmente la verdad, desiste incluso de tener celo por ella.

Isaac de Nínive – Siglo VII